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La crisis, cómo empieza a afectarte y hacia dónde va

27/06/2019 | España

Ya estamos en crisis: el PIB solo creció un 0,6% en España en el segundo trimestre del año. Da igual la bajada de tipos del Banco Central Europeo. Da igual hasta que estén en negativo. Ya estamos en deflación: de un año a aquí los precios son, de media un 0,1% más bajos. Y éso es malo para ti y anuncia tiempos aun peores.

No pienses que la deflación significa que la hipoteca va a salir más barata. Los bancos, para cubrirse están ofreciendo tipos fijos, es decir cobrar siempre el mismo porcentaje. Así, si los tipos bajan aun más, ellos aumentarán márgenes. El 42,3% de las hipotecas son ya así. Pero lo que es más importante, en deflación la actividad económica se retrae en general... y se conceden menos créditos porque el riesgo de desempleo es mayor en quien la pide. Se redujo el número de hipotecas concedidas y el valor medio de estas subió: es decir, los bancos están prestando menos a los trabajadores... y todo apunta a que lo van a hacer aun menos.

El capital no encuentra destino productivo, el desempleo aumentará de nuevo

El capital está seriamente «enfermo». A día de hoy las inversiones de ‎ capital especulativo‎ en el mercado de deuda que pagan en negativo, es decir, que cada mes que pasa pierden dinero, ascienden a 13 millones de millones de dólares. Lo más llamativo: los inversores siguen comprando porque esperan que los tipos bajen aun más en breve y que por tanto la deuda que compren entonces pierda aun más dinero cada mes. ¿Por qué esperan nuevas bajadas de tipos aun estando en Europa en negativo? Porque ven un horizonte de nuevas caídas de la producción y el empleo y a los gobiernos dopando aun más la circulación con tipos negativos más altos. La «palanca» de los tipos negativos significa que los bancos pagan a los capitalistas que toman dinero prestado. Tal es la desesperación por colocar capitales. Y ni por esas... pero en el capitalismo, si los capitales no se colocan... el empleo se destruye.

Pero ¿no era que la guerra comercial se iba a tomar un respiro con el G20 de Japón? Hoy la prensa de todo el mundo recoge una noticia china que asegura que EEUU y China han firmado un protocolo de tregua comercial secreto que se hará público en estos días. Pero tregua y paz son cosas bien distintas. Los grandes medios americanos señalan que en realidad la tregua es solo una reducción de marcha en una guerra que va para largo y los chinos señalan que en el debate de los candidatos demócratas a primarias de ayer en la TV de EEUU, la mayoría de los candidatos demócratas competía con Trump en beligerancia frente a la potencia asiática. Viene más guerra comercial y más virulenta.

La ofensiva inevitable contra tus condiciones de vida

Con la actividad económica cayendo y los estados recaudando menos, el horizonte inevitable para los europeos es más austeridad. Eso significa en primer lugar peores condiciones de vida en general y más «desastres». Para dar un ejemplo de hoy: a consecuencia de los «recortes» de los últimos diez años, solo en Francia hay 25.000 puentes en mal estado estructural. ¿Invertirá el estado en repararlos? ¿Cuánto tardaremos en tener otra Génova? El efecto de la crisis no es mejor en las empresas. Otro ejemplo de hoy: en EEUU las autoridades han encontrado fallos de seguridad serios en el Boeing 737 Max... que en Europa utilizan las principales aerolíneas «low cost». ¿Invertirán en comprar nuevas flotas para retirarlos en este contexto?

Con unas expectativas de crisis y más crisis, la inversión caerá más rápido que los tipos de interés. El propio sistema financiero ahondará sus grietas... y la presión ante los gobiernos para privatizar las pensiones aumentará. La «mochila austriaca» será en España el gran tema de legislatura... y de modo inmediato, la ‎precarización‎ y el desempleo subirán, con el tiempo de trabajo real. ¿Qué otra cosa pueden hacer las empresas para mantener el dividendo?

El ejemplo de Sudamérica y la perspectiva global

No es un fenómeno europeo, ni siquiera de los países centrales. Es mundial. Hoy mismo las bolsas sudamericanas daban record de mínimos en la apertura. Se esperan datos malos de Brasil y en Argentina, que sufre desde hace un año el torbellino de la guerra comercial en propias carnes, la «buena noticia» es que la producción sigue cayendo trimestre a trimestre pero... un poco menos de lo esperado. ¿La realidad desde la mirada de los trabajadores? El 70% de la población cobra menos que el coste de la canasta básica.

¿Qué significa todo esto?

Lo que la crisis muestra de manera evidente es la contradicción cada vez más brutal entre las necesidades del capital y las necesidades humanas. Para el capital la forma de enfrentar la crisis es empeorar contratos, aumentar el tiempo trabajado sin pagar más, aumentar la agresividad frente a otros estados para conseguir mercados, privatizar las pensiones, reducir servicios básicos como la salud, no «gastar» en mantenimientos esenciales... Y sin embargo toda la base material y de conocimiento -desde las máquinas hasta los robots y la Inteligencia Artificial- están ahí, listos y preparados para producir y satisfacer las necesidades de todos. Hoy la logística de todo y la producción de casi todo podría hacerse con muy pocas horas de trabajo humano y produciendo todo lo necesario, en abundancia, para todos y en todo el mundo. Lo que falla es el capital. Hoy es una apisonadora desbocada en medio de la multitud. Lo primero es destruirla.