«Impeachment» qué es, por qué ahora y qué significa para ti
La prensa de todo el mundo abre con la misma noticia: los demócratas ponen en marcha en el Congreso una investigación para llevar al «impeachment» a Trump.
¿Qué es?
El «impeachment» es un juicio en el que el Parlamento estadounidense -primero el congreso y luego el senado- se convierten en tribunal para juzgar si el presidente ha deshonrado su juramento. Acaba, de tener éxito, con su destitución. Es el equivalente salvaje, en el presidencialismo, de una moción de censura bajo una forma de gobierno parlamentarista.
¿Por qué un «impeachment»?
La oposición demócrata se ha basado en dar continuidad a los temas de la campaña electoral para demostrar que Trump es indigno del cargo. ¿Que las acusaciones de abuso verbal o físico de mujeres no sirvieron para retraer el voto femenino? La maquinaria social demócrata se aplicó a crear primero y alimentar después el #metoo. Pequeño problema: hizo más sensibles a su votante y acabó golpeando a sus propios candidatos desde Joe Biden a Bernie Sanders. ¿Qué la inteligencia rusa azuzó vía anuncios en Internet las divisiones americanas? Se pone al FBI a investigar caiga quien caiga y no importa la erosión de las instituciones del poder, si Trump era un «tapado» de Putin. Como no podía ser de otra manera, ni los informes del FBI ni el senado -con mayoría republicana- llegaron a establecer unas bases suficientes como para poner en marcha el impeachment. Entre otras cosas porque las elecciones de medio mandato no cambiaron, como los demócratas esperaban, la mayoría en el senado.
Por qué ahora
La excusa es embrollada, tanto que no se sabe a quién deja peor, si al principal candidato en las primarias demócratas (Biden) o a Trump. Resulta que siendo Biden vicepresidente de Obama, colocó a su hijo como consejero en una empresa de energía en Ucrania que es la madre de todas las corrupciones en el país. Trump y su amigo el ex-alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani, llevan largo tiempo buscando pruebas de que Biden presionó al poder judicial ucraniano para evitar una investigación de corrupción sobre su hijo. Al parecer, en una conferencia telefónica entre Trump y el nuevo presidente Zelenski, el presidente norteamericano habría pedido a su colega si podía pasarle información al respecto. Trump no lo niega y los demócratas ven en esto un uso espurio del poder presidencial para sacar mierda contra un rival político.
¿La realidad? Trump va al alza en las encuestas desde mediados de 2017 y los demócratas han empezado con mal pie las primarias. La estrategia «socialista» no está funcionando tanto como algunos esperaron y los sondeos dan una sólida ventaja a Trump. Y esa es precisamente la defensa que está jugando Trump desde su primera respuesta directa al «impeachment». Vean el vídeo que colgó en twitter:
https://twitter.com/realDonaldTrump/status/1176610391058722816
¿Qué significa en el resto del mundo?
Hace tiempo venimos señalando que:
A día de hoy la principal apuesta de la burguesía europea en el eje franco-alemán es esperar a que Trump bien no pueda presentarse, bien pierda las elecciones para un segundo mandato. Si consiguen llegar hasta 2020 y Trump no renueva… el daño sería «reversible».
Es decir, la clase dirigente europea -y no solo europea, piensen en la emigración venezolana y sus aliados desde Piñera a Duque- va a ser beligerante en lo que viene. Y lo que viene no va a ser simplemente un aséptico proceso judicial para determinar si Trump abusó o no de los poderes que le confiere el cargo. La primera salva la dió el propio Trump en su discurso ante la ONU ayer. Recogiendo lo que el neo-nacionalismo y el populismo europeos vienen proponiendo desde hace tiempo: patriotas contra globalistas. Le añadió eso sí un toque definitivamente local: cruzada contra el «socialismo» y «comunismo» que en realidad, según él, solo significarían «dar poder a la clase dominante».
https://twitter.com/WhiteHouse/status/1176557478139584519
Está hablando obviamente de la facción de la burguesía estadounidense que juega a incubar a Ocasio, sostener la «identity politics» y vender el «green deal». Eso es para él socialismo porque entre los demócratas la «S word» ha dejado de ser tabú. Y «comunismo» no es otra cosa en ese discurso que Venezuela y Cuba... no vayan a dispersarse los «latinos» en su voto. Pero no nos engañemos, las batallas en el poder de EEUU son demasiado importantes para la burguesía de todos los países como para que sus deformes y burdos moldes conceptuales no acaben condicionando los del resto del mundo. El «impeachment», que tiene pocas si no ninguna, posibilidad de acabar en la destitución de Trump, lleva todas las de convertirse en el chispazo que precipite la formación de ideologías si no «de bloque», al menos sí de proto-bloques.