Emancipación habla ya en 4 idiomas
Emancipación tiene ya sus páginas y buena parte de los comunicados lanzados hasta ahora en español, francés, portugués e inglés.
¿Por qué? ¿Para qué?
Hace menos de dos meses pusimos en marcha nuestra Conferencia de Organización con el objetivo de unificar el trabajo de todas las iniciativas que habían surgido sobre la base de la recuperación y reapropiación del trabajo de la Izquierda Comunista Española y del FOR («Fomento Obrero Revolucionario»), sentando las bases para la constitución de una nueva organización política: «Emancipación». Aunque todos estas iniciativas y pequeños agrupamientos habían tenido lugar inicialmente en España, teníamos muy presentes las palabras que Trotski en 1930, cuando hacía un último intento por convencer a la Izquierda Comunista Italiana de que se uniera la Oposición de Izquierda Internacional que entonces estaba organizándose.
Considero que su concepción del internacionalismo es errónea. En última instancia, ustedes conciben a la Internacional como una suma de secciones nacionales o como el producto de la influencia recíproca de secciones nacionales. Esta concepción de la Internacional es, en el mejor de los casos, unilateral, no dialéctica y, por consiguiente, errónea. Si la izquierda comunista de todo el mundo agrupara solamente a cinco individuos, estos tendrían igualmente la obligación de construir una organización internacional simultáneamente con una o más organizaciones nacionales.
Es erróneo considerar que la organización nacional es el cimiento y la internacional el techo. La relación entre ambas es totalmente distinta. Marx y Engels iniciaron el movimiento comunista en 1847 con un documento internacional y con la creación de una organización internacional. Lo propio ocurrió en la creación de la Primera Internacional. La Izquierda de Zimmerwald recorrió la misma senda al preparar la Tercera Internacional. Es mucho más imperioso seguir esta senda hoy que en la época de Marx. Desde luego, es posible, en la época del imperialismo, que surja una tendencia proletaria revolucionaria en tal o cual país, pero ésta no puede florecer y desarrollarse en un país aislado; al día siguiente de su creación debe buscar o establecer vínculos internacionales, una plataforma internacional, una organización internacional, porque éste es el único camino que puede garantizar la corrección de la línea nacional. Una tendencia que se encierre en los marcos nacionales durante años, se condena irremediablemente a la degeneración.
León Trotski. «Carta al Consejo de Redacción de Prometeo», 19 de junio de 1930.
Dicho de otra manera: lo que caracteriza a una organización política de la clase trabajadora es un marco de análisis y posiciones para el conjunto de la clase... que es universal. Luego, se organizará territorial y lingüísticamente como pueda en función de sus fuerzas y de cómo se distribuyan por el mundo. Si se limita más o menos abiertamente a una parte de la clase, a la que vive en un territorio, lo más probable es que pierda la perspectiva de los intereses de la clase en su conjunto. Por eso, desde el primer momento, nuestra Conferencia de Organización no entendió sus trabajos limitados ni a España ni al ámbito de nuestra lengua, y por eso, también desde el primer momento, inició contactos con distintas organizaciones que, desde tradiciones y trayectorias diferentes, con diferentes grados de desarrollo y extensión, flameaban programas y posiciones fundamentales dentro de las fronteras de clase: internacionalismo y centralismo.
En el breve tiempo que llevamos desde entonces, nos ha quedado claro sin embargo que la evolución de la crisis y el conflicto inter-imperialista avanzan más rápido que la capacidad de los grupos políticos internacionalistas, existentes o emergentes, para coordinar sus capacidades y desarrollar una estructura común. Sirva Sudamérica de ejemplo. Por tentador que sea «concentrarnos» en el ámbito de nuestra lengua en la espera de que una coordinación internacional más amplia se construya, las tareas que la situación global impone nos ponen en la dicotomía de aceptar tomar la responsabilidad y la carga de trabajo correspondiente o convertirnos en un grupo «lingüístico» en oposición a nuestra propia visión de las tareas de todo grupo revolucionario,.
Sabemos además que el recurso utilizar el inglés como «lengua internacional» es un espejismo no menor que usar el francés o el español, así que todo esfuerzo por trascender las fronteras lingüísticas pasa por estar presente en varios idiomas... tantos como sea sostenible. ¿Por qué francés, portugués e inglés? Porque son los idiomas geográficamente fronterizos con las regiones y ciudades donde ya tenemos miembros militantes. ¿Por qué no lenguas que se solapan como el catalán, el gallego, el aymara, el quechua o el guaraní? Porque se solapan y la prioridad en este momento de dispersión internacional y debilidad del mensaje internacionalista, es poder llegar al mayor número con nuestras limitadas fuerzas. ¿Qué significa «sostenible»? ¿Qué ritmo de publicación vamos a seguir en las nuevas páginas? Nuestro objetivo por el momento es mantener los comunicados al día y una cierta actividad diaria en redes sociales. Por eso cada nueva página nace con su propia cuenta de twitter asociada: español, portugués, francés, e inglés.