4 gráficos que pronostican una recesión mundial
La tendencia general es a un decrecimiento de la tasas de ganancia, que se expresan en crecimientos del PIB per capita cada vez menores en los periodos de expansión y caídas cada vez más profundas en los periodos de recesión. La política Trump, obsesionada por la balanza comercial al punto de ligar la estrategia militar global a revertir el déficit es un intento desesperado por enfrentar esta tendencia general a la crisis y la recesión permanentes.
La economía alemana está temblando solo con la amenaza de guerra comercial. Contra el pronóstico oficial que auguraba crecimiento, los pedidos de la industria caen un 2,5% en abril. Es el tercer mes consecutivo de reducción de pedidos. Y la serie histórica dice que cuando eso se produce, viene, inmediatamente, una recesión.
Algunos países como España han salvado las apariencias del PIB estos años gracias a la inversión externa. Aunque dejemos de lado el carácter de esa inversión -fundamentalmente improductiva- el hecho es que la mera amenaza de guerra comercial la está inhibiendo. Algunos países como Francia se benefician a corto de la recolocación de capitales con el Brexit dentro de Europa. Pero la tendencia global es a una caída brutal liderada por el capital chino: estamos hablando ya de una caída global del 23% en las inversiones internacionales.
La cumbre del G7 supone el mucho más que el arranque de la guerra comercial, es el fin del orden comercial mundial. Los analistas han calculado el efecto sobre el PIB en tres escenarios. En el «mejor», EEUU aumenta aranceles y el resto de países no hace nada. Este escenario está ya cerrado. En el segundo, Europa y China responden a EEUU con represalias arancelarias moderadas y no se atacan entre sí. En el tercero las represalias van aumentando el tono pero no se producen ataques cruzados entre Europa y China. Este también está descartado: Europa ya ha iniciado su propia guerra comercial contra China. El último escenario, el peor de todos, aproxima el resultado sobre el PIB de una espiral de represalias arancelarias cruzadas. Es hacia donde vamos.